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Por Edgar García
El miedo y la desesperación superan el cansancio que siente la gente que vive más próxima a lugares de incendios forestales en la Chiquitania, así lo confirma Juan Carlos Torrejón, fotoperiodista de EL DEBER, que está recorriendo los lugares más afectados.
Torrejón estuvo este jueves en la comunidad Río Blanco, distante a 70 kilómetros del municipio de Concepción, «donde los bomberos de Cochabamba y comunarios (un total de 34 personas) comenzaron a trabajar desde las 20:00 del miércoles y hasta las 11:00 de este jueves, para remover todo y evitar que se vuelva a prender el fuego», relató.
«Los bomberos utilizaron maquinaria que prestó un empresario, evitaron que el fuego ingrese a la comunidad. Y aunque cayó una leve llovizna, ésta fue solo por escasos minutos, por lo que no ayudó en casi nada a la mitigación de las llamas», sostuvo Torrejón.
Los bomberos explicaron que durante toda la noche y hasta el mediodía lograron avanzar casi cuatro kilómetros. «Durante el recorrido revelaron que encontraron varios animales silvestres quemados, entre monos y tatús», remarcó.
Sin embargo, el temor persiste en la gente. «Es probable que el fuego se reactive a dos kilómetros más adentro. Por eso estaban ingresando bomberos de otras unidades, mientras que los que trabajaron durante más de 12 horas salían a descansar. Desafortunadamente los vientos están cambiando a sur y temen que se vuelva a propagar las llamas».