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Por Edgar García
Bastaron unos 30 minutos de una lluvia torrencial y granizada en Tarija para que las avenidas y parques se cubran de blanco y luego se conviertan en ríos provocando temor en la población que se vio sorprendida por el fenómeno, debido a que durante la mañana tuvieron un clima agradable de 30 grados Celsius.
El granizo con lluvias anegó principalmente en la avenida Víctor Paz Estenssoro. En la plaza Luis de Fuentes y Vargas, según El Deber.
A causa de este fenómeno climatológico, grumos de granizo penetraron al edificio central de la Alcaldía municipal, que obligó a las funcionarias a retirarlos con escobas hacia afuera.
El granizo también destruyó las hojas de árboles ornamentales y frutales que se esparcieron en el suelo.
Desde la Unidad Municipal de Gestión de Riesgos, se informó que se desplazaron a brigadas para evaluar los daños en varias zonas de la ciudad de Tarija y las comunidades campesinas.
El director de Gestión Ambiental y Riesgo de la Gobernación de Tarija, Reiner Figueroa, dijo que el fenómeno climatológico con lluvia intensa se prolongó por más de 20 minutos.
Para el agrónomo Mateo Tapia, en este tiempo ya no hay pronóstico que valga ni estadísticas, porque se evidencia el cambio climático con el paso de los años. “No fue prolongado el granizo, pero fue intenso. Se taparon los desagües con hojas y la quebrada El Monte creció en su caudal para inundar parte del barrio Palmarcito”, comentó el profesional.
El granizo cayó por tercera vez. La primera se produjo el 12 de septiembre pasado con una afectación a comunidades aledañas a la capital tarijeña y las más damnificadas fueron San Jacinto Norte y Yesera, donde destruyó cultivos agrícolas.
Siete días después volvió la granizada, pasando por barrios periféricos de la ciudad y poblados, con grumos de granizo y del tamaño entre 3 y 4 centímetros. El alcalde Johnny Torres activó un operativo de emergencia.
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