Marilyn Monroe: El Pragmatismo hecho figura pública

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Por Santiago Baudoin

Norma Jeane Mortenson fue una de las figuras más importantes de Estados Unidos en la década de los 40s y 50s. Su infancia complicada, la imágen distorsionada que tuvo siempre de los hombres y su exuberante belleza fueron piezas clave sobre las cuales construyó su alter ego o personaje llamado Marilyn Monroe. Pero nada de esto fue accidental, al menos en su origen la modelo y actriz diseñó meticulosamente su imágen para mostrarse como lo que los hombres de la época buscaban.

Un día como hoy pero hace 99 años nacía Norma Jeane en Los Ángeles, California en un contexto ya problemático. Su madre fue diagnosticada con Esquizofrenia cuando ella era apenas una niña, lo que la llevó a estar hasta en 12 hogares temporales y un orfanato. La madre de Mortenson llegó a decirle en una de las visitas de la niña al hospital psiquiátrico en el que se encontraba que su padre era Clark Gable, lo que dejó por años en la niña la esperanza de que su padre volvería y la rescataría del lugar en donde se encontraba. Su desesperación por ‘ser salvada’ la llevó a tomar la decisión de casarse con James Dougherty cuando ella tenía tan solo 16 años de edad.

Durante este matrimonio Dougherty es enviado al frente de batalla en la Segunda Guerra Mundial y Norma Jeane empieza a trabajar en una fábrica de municiones para poder sustentarse. Es ahí donde un fotógrafo la retrató para un artículo enfocado en mujeres que trabajaban durante la guerra. Sus fotos fueron muy bien recibidas por el público por lo que Norma Jeane se convirtió en una modelo pin-up y sus fotografías fueron muy bien recibidas en el frente de combate. Al que no le gustó el nuevo trabajo de Mortenson fue a su marido, por lo que luego de bastantes discusiones decidieron terminar el matrimonio en 1946.

Luego de su divorcio y gracias a su popularidad ella buscó ampliar su mercado buscando ser actriz. En este momento es que conoce a Ben Lyon, un miembro de 20th Century Fox que le entregó un contrato de seis meses como actriz de reparto y con el que acuñaron el seudónimo de Marilyn Monroe. Y desde ese momento también se empieza a diseñar a Marilyn. Desde la decisión de teñirse el pelo de rubio para lucir más caucásica, aplicarse diferentes cirugías estéticas (para nada tan normalizadas como hoy y sobre todo más peligrosas por los avances medicinales de la época) y la personalidad de Monroe que fue la que la llevó a lo más alto de Hollywood. Esa chica rubia, coqueta pero a la vez atontada que nunca se terminaba de enterar de lo que ocurría a su alrededor, risueña e inocente que siempre tenía la palabra justa en el momento justo.

Es así que empieza en la actuación primero en Fox donde no le renuevan el contrato, luego en Columbia Pictures donde se le fue dando un protagonismo progresivo pero que no le valió papeles mucho más importantes. En 1949 ante la falta de dinero aceptó una propuesta para posar desnuda para un calendario de gama baja, que en su momento no tuvo ningún impacto mediático. Esto cambió cuando Playboy compró los derechos de las fotos en 1953 para publicarlas en su primer número, lo que llevó a que la revista fuera un rotundo éxito de ventas, pero de las que Monroe no vería ni un solo dólar.

Sin embargo, las aprovecharía como una excelente maniobra de relaciones públicas. Cuando le preguntaron sobre el tema, Monroe respondió con un rotundo “Tenía Hambre” algo con lo que muchas mujeres de la época pudieron empatizar. También Monroe aprovechó esto para darle una vuelta más sensual a su persona, declarando ante la pregunta de qué usaba para dormir que utilizaba el perfume Chanel N° 5, lo que daba a entender que dormía sin ninguna prenda de vestir.

El final de sus días se reflejó como una lucha constante entre Norma Jeane y Marilyn. Como Norma Jeane quería mejores papeles, mayor control sobre sus personajes, mayor reconocimiento por parte de las productoras. Mientras que Marilyn se casaba con el beisbolista Jeo DiMaggio y se iba de luna de miel a Japón para poder ir a visitar a los soldados estadounidenses en Corea y cantarles para animarlos.

La relación tóxica de Norma Jeane con los hombres. Como ella trató de enfrentarse con las pocas herramientas que tenía ante la industria machista que utilizaba el personaje que ella tan bien había diseñado para su beneficio y sobre todo su ya fuerte adicción al alcohol y los barbitúricos la orillaron a quitarse la vida el 4 de agosto de 1962.

Marilyn Monroe quedó en la cultura popular como la imágen de la mujer perfecta, como un ícono femenino más que una persona. Quedó más representada por las pinturas de Andy Warhol que por su papel en Niágara o por sus fotos en Playboy. Fue la intención de Norma Jeane de sacar el mayor provecho de su imágen la que terminó por desdibujar su figura humana y dejarla expuesta en la memoria colectiva como una estatua a la que se le reza por un poco de su belleza.